Agosto 17, 2022

Aug 18, 2022

“Anoche, mi padre mató a otra dinastía política, y esos son los Cheney. Primero mató a los Bush, luego a los Clinton. Anoche mató a los Cheney. Así que Eric Trump, hijo del expresidente Donald Trump, interpretó anoche la derrota en las primarias de la representante Liz Cheney (R-WY).

No se equivoca en que el Partido Republicano ahora ha sido capturado por extremistas que rechazan los principios asociados a ese partido. La declaración de Trump refleja la realidad de que la multitud de MAGA de hoy rechaza la ideología del Partido Republicano de Reagan, que se basó en la idea, si no en la ejecución real, de que el gobierno no debe interferir con los mercados. Lejos de tratar de liberar los mercados, Trump y otros como él, incluido el gobernador de Florida, Ron DeSantis, han utilizado al gobierno para castigar a las empresas que no apoyan sus políticas y recompensar a las que sí lo hacen.

Usar el gobierno para recompensar a los amigos y castigar a los enemigos es competencia de autoritarios como Vladimir Putin de Rusia y Viktor Orbán de Hungría, quienes hablaron a principios de este mes en Texas en la Conferencia de Acción Política Conservadora. El apoyo de MAGA a tales tácticas encaja, ya que han rechazado los principios fundamentales de la democracia estadounidense.

La Declaración de Independencia y la Constitución establecieron que los estadounidenses tienen derecho a dar su consentimiento al gobierno bajo el cual vivimos y que somos iguales ante la ley. Pero el movimiento MAGA de hoy se basa en la Gran Mentira de que el expresidente Trump ganó las elecciones de 2020, y sus adherentes están actualmente comprometidos en el intento de asegurarse de que puedan manipular las elecciones en el futuro, estableciendo un estado de partido único cuyos líderes pueden hacer lo mismo. ellos desean.

Y al menos parte de lo que parecen querer es el establecimiento de una religión estatal que anule los derechos de los estadounidenses LGBTQ y les quite los derechos a las mujeres. De hecho, su visión se parece mucho a la de Orbán, quien sostiene que la democracia secular debe ser reemplazada por lo que él llama “democracia cristiana” o “democracia iliberal”.

Mientras Eric Trump podría ver esto como un triunfo, otros no. Edward Luce del Financial Times observó hoy: “He cubierto el extremismo y las ideologías violentas en todo el mundo durante mi carrera. Nunca me he encontrado con una fuerza política más nihilista, peligrosa y despreciable que los republicanos de hoy. Nada cerca.

Aunque esa observación fue impactante, no fue nada en comparación con lo que vino después. El general Michael Hayden, exdirector de la Agencia Central de Inteligencia bajo los presidentes George W. Bush y Barack Obama, retuiteó a Luce y comentó: “Estoy de acuerdo. Y yo era el director de la CIA”

Que este movimiento tiene designios peligrosos para nuestro gobierno recibió más confirmación hoy cuando Jordan Libowitz y Lauren White de Citizens for Responsibility and Ethics en Washington (CREW) informaron que el Servicio Secreto había notificado una amenaza específica contra la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, días antes de las elecciones de enero 6 en el Capitolio, pero no le dijo a la Policía del Capitolio hasta las 5:55 de la tarde de ese día, después de que ocurriera el ataque.

El 31 de diciembre, un usuario de Parler publicó: “El 6 de enero comienza el #1776 de nuevo… Lucha por TODO”, e incluyó a Pelosi en una lista de “enemigos”. Posteriormente, el relato fue más específico sobre el ataque. En la noche del 6 de enero, el Servicio Secreto envió la información a la Policía del Capitolio con una nota: “Buenas tardes, el Servicio Secreto de EE. UU. está notificando a la Policía del Capitolio de EE. UU. sobre el descubrimiento de una amenaza en las redes sociales dirigida a la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi. .”

El Servicio Secreto está bajo escrutinio porque los mensajes de texto de sus agentes del período alrededor del ataque fueron borrados de sus teléfonos, los teléfonos del secretario interino de Seguridad Nacional Chad Wolf y el subsecretario interino Ken Cuccinelli fueron borrados, y el inspector general designado por Trump para el El Departamento de Seguridad Nacional, Joseph Cuffari, se olvidó de informar al Congreso sobre la destrucción de pruebas durante más de un año y se ha negado a que su personal esté disponible para testificar sobre el asunto.

Pero no está claro que el intento del MAGA de tomar el gobierno se quede detrás de Trump. Hoy, el teórico de la conspiración Alex Jones, quien recientemente apareció en las noticias por su difamación de los padres de una víctima del tiroteo de Sandy Hook, anunció en su programa que cambiará su apoyo a DeSantis. Era un partidario lo suficientemente acérrimo de Trump que habló en el mitin del 5 de enero de 2021 en Washington, D.C., para animar a la multitud para el día siguiente.

Casi en el momento justo, Trump comenzó a plantear la idea de que publicaría la cinta de vigilancia de los agentes del FBI que recuperan los documentos gubernamentales robados de su propiedad en Mar-a-Lago en lo que parece ser un intento de recuperar su base. El argumento para publicar la cinta es que sus partidarios se resentirán de los agentes federales que rondan la propiedad de Trump, alimentando la idea de que es víctima de persecución política. Otros asesores advierten que, en realidad, ver cuántas cajas hay con documentos, incluidos los documentos de alto secreto, se recuperaron, serán contraproducentes.

“Una cosa es leer un montón de números en una lista de inventario, y otra es ver a los agentes de la ley sacando más de una docena de cajas de la casa del presidente Trump sabiendo que probablemente contienen documentos confidenciales. No veo cómo eso lo ayuda. ”, dijo una persona cercana a Trump a Gabby Orr, Sara Murray, Kaitlan Collins y Katelyn Polantz de CNN. Se ajustaría al patrón habitual de Trump para él simplemente decir que lo lanzará para generar historias que lo mantengan en las noticias.

La voluntad de los partidarios de Trump de encontrar otro candidato probablemente sea, en parte, un reflejo de los problemas legales que se le están acumulando al expresidente.

Hoy, el abogado de campaña de Trump, Rudy Giuliani, testificó durante seis horas ante un gran jurado en el condado de Fulton, Georgia, que está investigando el intento de Trump de anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia. Giuliani alegó manipulación de votos en Georgia incluso después de que se demostró que sus teorías eran falsas.

Los fiscales le dijeron a Giuliani que él es el objetivo de la investigación, lo que significa que es posible que sea acusado. Ken Frydman, exsecretario de prensa de Giuliani, le dijo a CNN ayer: "Él sabe que mintió por su cliente, y sabe que todos lo sabemos... Creo que, en este momento de su vida, su objetivo es morir como un hombre libre". ."

Mañana, el ex director financiero de la Organización Trump, Allen Weisselberg, se declarará culpable de 15 delitos graves asociados con la conspiración para evadir impuestos sobre la nómina por $1.7 millones durante 15 años al cobrar la matrícula escolar de sus nietos, un apartamento gratis, un coche, y así sucesivamente. El trato con la oficina del fiscal de distrito de Manhattan lo deja libre con multas y un mínimo de 100 días en la cárcel, una sentencia muy leve. A cambio, Weisselberg testificará contra la Organización Trump en su próximo juicio de octubre por delitos relacionados, aunque no contra el propio Trump.

Este acuerdo debilita seriamente la posición legal de la Organización Trump en el caso, pero deja intactos a Trump y su familia. Si el caso socava el negocio de la familia Trump, su base financiera tradicional, los miembros de la familia podrían esperar consolidar una nueva base financiera en el sistema político estadounidense.

Translated by: M. Sanchez

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Notes: