Febrero 11, 2023
Desde que la representante Marjorie Taylor Greene (R-GA) lideró a los republicanos en gritos de "¡Mentiroso!" cuando el presidente Biden dijo en su discurso sobre el Estado de la Unión que “algunos republicanos quieren que Medicare y el Seguro Social finalicen cada cinco años”, los republicanos han estado inundando los medios sociales y de noticias con acusaciones de que Biden estaba mintiendo.
En el discurso, Biden continuó: “Eso significa que si el Congreso no vota para mantenerlos, esos programas desaparecerán. Otros republicanos dicen que si no recortamos el Seguro Social y Medicare, dejarán que Estados Unidos no pague su deuda por primera vez en nuestra historia”.
De hecho, la declaración de Biden era cierta. Se basó en el plan de 11 puntos del senador de Florida Rick Scott, publicado en febrero de 2022, que prometía: “Toda la legislación federal expira en 5 años. Si vale la pena mantener una ley, el Congreso puede aprobarla nuevamente”. (También prometió “vender todos los activos, edificios y terrenos del gobierno no esenciales, y usar las ganancias para pagar nuestra deuda nacional”, sin definir “no esencial”).
Desde que los republicanos ganaron el control de la Cámara, los extremistas también han dicho que no aprobarían un aumento limpio del techo de la deuda sin recortes de gastos. La historia de los llamados republicanos a recortes en la Seguridad Social es larga y profunda, pero solo se remonta a 2020: Trump prometió hacer recortes en su segundo mandato; el exvicepresidente Mike Pence pidió la semana pasada “reformas modestas en los derechos”, incluida la privatización; El senador de Wisconsin, Ron Johnson, ha pedido que los programas pasen a una financiación anual para que tengan que renovarse cada año; y el Comité de Estudio Republicano, que incluye a más de 150 miembros republicanos de la Cámara, pidió este año aumentar la edad de elegibilidad de 66 o 67 a 70 para el Seguro Social y de 65 a 67 para Medicare.
La declaración de Biden provino de lo que se denominó la "comunidad basada en la realidad" en 2002.
Ese año, un asesor principal de George W. Bush le dijo al periodista Ron Suskind que “muchachos como yo estaban 'en lo que llamamos la comunidad basada en la realidad', que él definió como personas que 'creen que las soluciones surgen de su juicioso estudio de discernible realidad'”. Suskind respondió hablando de los principios de la Ilustración, los principios en los que los Fundadores basaron la Declaración de Independencia, que colocan la observación cuidadosa de la realidad en el centro del progreso humano. Pero el asistente de Bush no quería saber nada de eso, recordó Suskind: “Él me interrumpió. "Esa ya no es la forma en que el mundo realmente funciona", continuó. Ahora somos un imperio, y cuando actuamos, creamos nuestra propia realidad... Somos actores de la historia… y ustedes, todos ustedes, se quedarán solo para estudiar lo que hacemos”.
La declaración de que Biden ganó las elecciones presidenciales de 2020 también proviene de la comunidad basada en la realidad.
Hoy, Josh Dawsey, del Washington Post, informó que la campaña de Trump contrató a una firma consultora para tratar de probar que las elecciones habían sido robadas. El Grupo de Investigación de Berkeley examinó los resultados de las elecciones en seis estados indecisos, pero no pudo encontrar nada que hubiera cambiado el resultado. “Revisaron todo”, le dijo una fuente a Dawsey: “cambio de dirección, inmigrantes ilegales, recolección de boletas, personas que votaron dos veces, máquinas manipuladas, boletas que se enviaron a direcciones vacantes que se devolvieron y votaron… Literalmente cualquier cosa que se te ocurra. Anomalías en la participación electoral, anomalías en la fecha de nacimiento, si votaron los muertos. Si había algo bajo el sol en lo que se pudiera pensar, lo miraron”.
Los consultores informaron a Trump, al jefe de gabinete Mark Meadows y a otros sobre su evidencia de que la elección de Biden fue legítima en diciembre de 2020, antes de los eventos del 6 de enero, pero el campo de Trump siguió insistiendo en que la elección había sido robada.
El rechazo a la realidad ha llegado tan lejos que tenemos en el Congreso al representante George Santos (R-NY), quien parece haber fabricado toda su biografía. Ayer, Jacqueline Alemany y Alice Crites del Washington Post revelaron que la biografía de otra representante derechista recién electa, Anna Paulina Luna (R-FL), también es sospechosa. Los miembros de la familia cuestionan sus historias de una juventud aislada y empobrecida, no hay registro de un allanamiento de morada nocturno que, según ella, fue formativo, y su adopción de su herencia hispana (la familia de su madre es mexicoamericana) es tan reciente que en 2015 identificó en un formulario de inscripción para votar como “Blanco, no de origen hispano”.
Después de que apareció la historia, el abogado de Luna emitió una declaración de ella diciendo que “cualquiera que sea una minoría conservadora es una amenaza para el control de la izquierda. Pueden tratar de desacreditarme, pero desafortunadamente para ellos los hechos arruinan por completo su historia”.
Hay una diferencia entre el giro político, que prácticamente todos los operadores políticos usan y que generalmente significa hacer una declaración sin contexto completo, por lo que es engañosa, y rechazar la comunidad basada en la realidad a favor de las mentiras y los ataques. Decisiones políticas que no se basan en realidad nos roban nuestro derecho a tomar decisiones informadas sobre nuestro gobierno y lo que hará.
El Seguro Social y Medicare actualmente son financieramente inestables. Se pueden estabilizar recortando los beneficios, aumentando los impuestos, reorganizando la financiación del gobierno o mediante alguna combinación de los tres. Biden quiere subir los impuestos; Los republicanos quieren recortar los beneficios, pero no dirán cuáles y ahora niegan que se refirieran a la Seguridad Social y Medicare.
El viernes, Scott presentó un proyecto de ley para reorganizar los fondos del gobierno, diciendo que "aumentaría los fondos" para los programas, pero de hecho, encuentra el dinero logrando otro objetivo republicano: recortar los $80 mil millones de la Ley de Reducción de la Inflación que restauró los fondos a el Servicio de Impuestos Internos. Esa financiación ha permitido que el IRS responda el 88,6 % de las llamadas telefónicas de los contribuyentes este año, frente al 13 % en la temporada de impuestos de 2022 y el 11 % del año anterior. Al agregar soporte telefónico automatizado y funciones de chat, el 93.3% de los contribuyentes han podido obtener soporte. Es casi seguro que los demócratas no estarán de acuerdo en detener este programa, y es probable que Scott espere que queden registrados como “votantes en contra” de más dinero para el Seguro Social y Medicare.
Los votantes necesitan información basada en hechos para elegir a las personas que promulgarán las políticas que la mayoría de nosotros queremos.
Necesitamos que los políticos participen en la comunidad basada en la realidad.
Translated by: M. Sanchez
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Notes:
Ron Suskind, “Faith, Certainty and the Presidency of George W. Bush,” New York Times Magazine, October 17, 2004, at https://www.nytimes.com/2004/10/17/magazine/faith-certainty-and-the-presidency-of-george-w-bush.html
https://rescueamerica.com/wp-content/uploads/2022/06/RickScott-12-Point-Policy-Book.pdf
https://www.washingtonpost.com/politics/2023/02/11/trump-campaign-report-electoral-fraud/
https://www.washingtonpost.com/politics/2023/02/10/anna-paulina-luna-republican-biography/
https://thehill.com/finance/3850036-republicans-social-security-medicare-debt-ceiling/
https://www.cnn.com/2023/02/09/politics/medicare-social-security-what-matters/index.html
https://www.washingtonpost.com/politics/2023/02/10/biden-governors-brazil-president-pence-subpoena/
https://thehill.com/finance/3850036-republicans-social-security-medicare-debt-ceiling/